Desde los abismos donde la divinidad se desmorona y el velo de la ilusión es rasgado, emerge “Never Trust”, una manifestación simbólica de la corrupción de los dogmas del amor y la falsedad del destino impuesto. En esta prenda, el Cupido Satánico ya no es un emisario del deseo puro, sino el heraldo de la revelación oscura: el amor no es más que un espejismo construido para someter.